Estoy harta. Harta de
las paredes, de la sal de mis lágrimas marcando la piel, de las cicatrices.
Harta de anhelar una vida que no volverá, que nunca fue. Harta de la pelea por
un objetivo inalcanzable, harta de que nada merezca la pena. Hasta
respirar harta.
Cansada de encontrarte
desarmada ante el mundo. Cansada de la soledad, no poder combatirla y que te
acompañe allá donde vas. Cansan los brazos vacíos, los besos perdidos, las
palabras muertas antes de ser creadas. Cansa el frío del día a día sin metas
por alcanzar. Hasta el soñar cansa.
Duelen las despedidas,
los ojos mudos, las manos atadas. Duele que cada uno que se marcha se lleve
consigo una esquina del corazón. Duele que éste se endurezca, que ni la pena
sienta y que deje de luchar. Duelen los gritos ahogados. Hasta amar duele.
Quisiera dejar de ser
pájaro enjaulado, atado por cadenas de responsabilidad, quisiera volar.
Quisiera ser lo que nunca he sido, lo que nunca he valido. Quisiera...por
querer quisiera ser un recuerdo imborrable con olor a azahar. Quisiera ser todo
lo que no he sido, lo que no puede ser ni será. Quisiera, por querer quisiera que me borrase
la mar.
2 comentarios:
No sé qué ha pasado, pero ánimo y un abrazo. Si quieres hablar, ya sabes dónde encontrarme.
Hola Ana, nada, un bajonazo, post, pre y durante stress, pero nada grave. En estos momentos sale mi lado frustrado de escritora ( que es penoso, dicho sea de paso) Un millón de gracias por la postal!!!! Jo, ando tan liá que se me olvida! A ver si saco rato y leo tu viaje por Escocia. Ahora mismo estoy con Oposiciones y Máster >_< ah! Y sin dejar de trabajar! Y haciendo cursos como loca para tener méritos Y_Y
Un super abrazo para tí también!!!
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