Esta es parte de la coreo
Fijaos en la extensión de sus piernas, la musculatura de su espalda…
Y esta la versión más tradicional
La bailarina principal se llama Uliana Lopatkina
Sólo los ojos conservan su juventud.
D. H. Lawrence describió así su novela a Edward Garnett :
“Una mujer de carácter y refinamiento desciende a la clase baja y no está satisfecha con su propia vida… Conforme sus hijos van creciendo, los toma como “amantes”- primero el mayor, luego el segundo…Pero cuando llegan a la edad adulta, ellos no pueden amar, porque su madre es el poder más fuerte que maneja sus vidas, y los retiene… Tan pronto como entran en contacto con otras mujeres hay una ruptura. William se entrega a una mujer superficial, pero su madre se “queda” con su alma. Pero esta ruptura lo mata porque no sabe a dónde pertenece. Paul conoce a una mujer que pelea por su alma (Miriam) - lucha con su madre: El hijo quiere a su madre- todos los hijos odian y sienten celos del padre… El hijo ( Paul) decide cederle su alama a su madre y buscar la pasión ( Clara). Y se produce otra ruptura. Pero de manera inconsciente, la madre se da cuenta de lo que ocurre y comienza a morir. El hijo deja a su amante, vuelve con su madre moribunda. Al final, se queda solo, desnudo de todo, a la deriva, hacia la muerte. “
(14 de noviembre de 1912)
Diecisiete años después pienso, que todos y cada uno de los personajes de esta novela son dignos de lástima. A lo largo de sus 446 páginas (edición Wordswoth 1993) la simpatía o empatía con los personajes va cambiando. Entiendes la infelicidad de la Sra. Morel, porque ella no imaginó su vida así, porque ha de sufrir un marido que la engañó desde el primer momento. Entiendes la infelicidad del Sr. Morel, porque sus esfuerzos por ser lo que su familia espera de él, acaban en saco roto. La infelicidad de los hijos varones ante una madre que intenta vivir el amor de un hombre a través de sus hijos (no penséis que hay incesto), que lucha contra las mujeres que aparecen en la vida de sus hijos porque piensan que le robarán ese amor. Entiendes la infelicidad de esas dos mujeres, que a pesar de que se entregan en cuerpo y alma, tan solo obtienen una parte de ese ser, porque el resto es propiedad de su madre. Comprendes que la novela no es un canto a la infelicidad, sino seres que no saben cómo completar todas las facetas de su vida, de manera que se sienten rotos, vacíos, incompletos.
Mrs. Morel: “No has encontrado a la mujer adecuada”.
Paul: “Y nunca conoceré a la mujer adecuada mientras vivas “·